Evidencias

El cielo lloraba, como descargando penas acumuladas ya hace tiempo. Tres largos días que resultaba casi imposible salir de la casa.

Yenys y su hermano mellizo, Damián, habían quedado en silencio después de ver la película por TV.

Relataba un caso, que aseguraban ser real, sobre una pareja que recurrieron a una "madre en alquiler", para así lograr, por su intermedio, un descendiente de la familia.

   -Es casi increíble como la tecnología moderna brinda tanta ayuda a la continuación de la especie, ¿verdad?

   -Sin duda, tu como mujer, quizás comprendas más de cerca esa sensación de impotencia para traer al mundo un sucesor.

   -Sin embargo, considero que no es lo mismo, y llegado el momento estoy segura que no cambiaré de opinión.

   -Si, es un poco temprano para que hables sobre tales sensaciones,¿o es que piensas casarte joven?, no olvides que recién el mes próximo cumpliremos 17 años...

   -Nunca se sabe lo que nos repara el destino; yo por mi parte...estoy preparada para cualquier aventura amorosa.

   -Deja que nuestro padre te escuche y arderá Troya en esta casa....no me hagas reír...

   -Justo ayer hablamos con mamá, sobre el tema de los noviazgos prematuros y ella piensa como yo.

   -No me referí a la mami; y si te consideras tan valiente, sólo toca el tema con papá, y ni me quiero imaginar la que se te armará...ja, ja, ja.....

   -Sabes que? hoy o mañana encontraré el momento preciso, y después te cuento como fue.

   -Me muero de curiosidad...

Pasaron los días y llegó el fin de semana, siempre tan esperado.

Ese sábado, cerca del mediodía, aprovechando que su padre estaba en el patio lavando el coche, nuestra pizpereta jovencita se acercó hasta allí y le pidió permiso para  poder llegar un poco más tarde de lo acostumbrado esa noche, pues era la fiesta de los quince de Cristi su mejor amiga.

    -No entiendo porqué debes quedarte allí hasta ser la última, ¿acaso eres la encargada de cerrar las puertas?

   -No pa, no entendés...con seguridad nos gustará quedarnos a solas y cuchichear sobre como fue la fiesta, cosas de mujeres...no seas malito...

   -Ya hablé con mamá y ella dijo que con seguridad no estarás de acuerdo y es por ello que te lo consulto...

   -Sabes muy bien cuales son mis exigencias, no me agrada que andes por las calles, de noche y menos que menos sola.

   -Entonces...le podría pedir a Raulito, nuestro vecino, que me espere y así podrá acompañarme hasta casa, ¿te parece buena idea?

   -Raulito...desde cuando eres amiga de ese bravucón, que según lo que se comenta es un picaflor, y además es un poco mayor...si no me equivoco ya pasó los 18 o tal vez 19, ¿no?

Dudo unos instantes,,,y  casi murmurando dijo...

   -No es verdad lo que dicen, son puras habladurías, yo sé que no son ciertos todos esos chismes.

Aquí el asunto tomó otro cariz...el ya molesto padre, dejó a un lado la manguera, se secó las manos con un trapo, y sin más vueltas preguntó...

   -¿Y cómo es que estás tan segura de que son sólo habladurías?

   -Pues...muy sencillo...ya hace unos meses que somos un poco más que amigos y por eso...

   -¿Qué me estás tratando de insinuar?

El tono y volumen de su voz se escuchó desde el interior de la casa;  su madre se asomó por la ventana, preguntando...

   -¿Qué son esos gritos Guillermo... qué pasa?

   -¡No sé! lo estoy tratando de averiguar, por favor no me interrumpas.. y vos mocosita, explícame en pocas palabras, que es lo que me empezaste a contar...

   -Sólo la verdad, no soy mentirosa y no pretendo encubrir mis relaciones con Raulito, y no entiendo porque gritas de esa forma desaforada, mucho me molesta. Ya no soy una nena, aunque no lo hayas notado...

A todo esto, con pasos ligeros, llegó hasta ellos la intrigada madre, que trató de entender la causa de tal enfrentamiento entre padre e hija.

   -No es nada, mami, el papi no quiere reconocer que ya pasé la edad de las muñecas y tengo otra clase de inquietudes.

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La mujer cerró la revista que estaba leyendo y que finalizaba con un “continuará…hasta la próxima semana amigos” Aún con el ceño fruncido por la frustración de no saber el desenlace… cerrando los ojos pensó ¿Cuál será el desenlace de este acontecimiento? hurgó en su interior y se le vinieron a la mente varias probabilidades, entonces resuelta se fue a la computadora e intentó poner orden a sus creaciones….

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El tono de voz iba creciendo y la cara de todos, ante esto, anunciaba sin lugar a dudas un vendaval pronto a estallar .El padre rojo de ira, la madre con lágrimas, acompañaba con gestos conciliadores, que poco aportaban ya que su hija mostraba sin ambages  la decisión  de avanzar hasta el final.

   -¡Calla, no es momento de enfrentar a tu padre!

   -¿Cuándo va a serlo?¡¡¡Dime!!!Debe conocerme, saber quién soy, que pienso, mis búsquedas y para ello debe escucharme.

El padre se adelanta desafiante para callarla, pero Damián resuelto, interviene...

   -¡Por favor familia! yo también creo que no es el momento…

   -¡Basta!-, quiero que todos sepan que amo y soy amada, que voy a luchar por ello, que tengo derecho a ser feliz. Es más, no pienso claudicar en mis derechos.

La madre persuasiva, intenta callarla.

El padre vuelve a arremeter contra la niña, hasta abofetearla, diciendo..

    - ¡¡¡El que manda y decide soy yo, no saldrás con ese muchacho y por el momento con ninguno otro!!!

   -Disculpa padre, dice Damíán, te has extralimitado y ahora me doy cuenta que con frecuencia lo haces y no nos das espacio para crecer, solo nos das cosas materiales. Y ahora esta horrible agresión ¿no te das cuenta que hemos crecido?¿y qué debieras permitirnos hablar de nuestros proyectos, sin temer por ello a una descalificación o reproche?

Ambos padres, parecen enajenados frente al desarrollo de los acontecimientos. Él, furibundo, ella suplicante.

   -¡Madre por favor déjanos exponer nuestros pensamientos!, por favor no intervengas.

El padre ya en un estado de supremo desnivel, se sienta para tomar fuerzas y de nuevo avanzar.

Aprovecha la niña quien larga en un total desborde emocional...

   -Debes dejarme padre, mi novio y yo hemos decido que somos felices y queremos formar pareja

   -¡Nunca!

   -Pues es tarde entonces, estoy embarazada.

   -¿Qué?

   -Si papá hace varios meses que queríamos comentarlo pero fue imposible, hemos llegado a estas instancias porque de otra manera seguro no nos hubieras permitido ser novios, casarnos, en fin ser felices...

El padre, cae estrepitosamente al suelo….hay un grito de dolor.

Han pasado varios meses, la casa huele a perfume de bebé…en la cuna, una niña sonriente y feliz, juega con el sonajero, Yenys la observa con arrobo. En el jardín, separados solo por un amplio ventanal,  el resto de la familia bebe un humeante café, las amapolas, parecen agradecidas del clima familiar, lejos quedaron las reyertas, el hospital y los desencuentros.

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La mujer guarda en archivo, imprime y dice con satisfacción, bueno este es el final que elijo, voy a mandarlo al director de la revista y seguramente éste se lo alcanzará al autor y quizás tenga suerte… y hasta puedo convertirme en famosa…

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María de los Ángeles Rocatto (Argentina)

Beto Brom (Israel)

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*Registrado/Safecreative N°1507144629177

*Música de fondo: Chopin / Nocturne N°1-Op.9